Esta entrada es la primera de muchas en la que os aconsejaremos sobre cómo mejorar tanto en lo físico como en lo psicológico para encontrar pareja. Poco a poco iremos subiendo consejos con este título, y en este primer avance tenemos estos tres tipos de consejos:
Para no tener gases:
- Come despacio y mastica bien la comida (lento pero seguro). Así digerirás mejor los alimentos, teniendo digestiones poco pesadas y evitarás tragar mucho aire.
- Evita tomar bebidas con gas, leche en exceso, alimentos con azúcar refinado, y algunas verduras.
- Haz ejercicio.
- Después de comer debes esperar 2 horas aproximadamente antes de echarte la siesta, así evitas que se altere el proceso de digestión y se generen gases.
- Tomar una infusión de manzanilla, canela, lavanda o menta facilita la digestión.
- Comer papaya o piña ayuda a evitar los gases.
- Relájate, el estrés facilita el incremento de gases intestinales.
- Reduce el consumo de alimentos y productos que manchan nuestros dientes: tabaco, te, coca-cola, vino, café, etc.
- Ingiere lácteos, ya que son ricos en Calcio y Potasio que favorecen tu salud bucodental (y así puedan facilitar la labor de tener unos dientes más blancos).
- Bebe con una cañita, así los líquidos no estarán en contacto con la dentadura.
- No limpiar con fuerza los dientes al cepillarse. Si se cepilla con mucha fuerza se puede desgastar el esmalte dental y hacer hendiduras en las raíces de los dientes.
- Mantener limpios los dientes. La buena higiene oral ayuda a evitar que los dientes se manchen por acción de alimentos o líquidos.
- Lavar la piel es esencial, pero la limpieza excesiva puede causar daños como resecar la piel o irritar el acné existente.
- Recuerda lavarte después de hacer ejercicio para evitar que el sudor bloquee los poros y empeore el acné.
- Si usas productos cosméticos para la piel como lociones o maquillaje, busca aquellos que sean no comedogénicos o no acnegénicos, es decir, aquellos que no bloqueen los poros.
- Tener una alimentación rica en frutas y verduras Se debe evitar alimentos grasosos y chocolates y, en su lugar, se debe cambiar a una dieta donde se incluyan alimentos crudos, especialmente fruta y verduras frescas, semillas brotadas y cereales integrales.